Nueva York, 1957, Este fué el año en el que Michael Knudsen creó una de las marcas de perfume más antiguas que aún existen en Estados Unidos: Gravel New York. Desde entonces, la marca ha sido testigo de las tendencias a lo largo de las décadas, manteniéndose inmutable a su identidad. Perfumes que, al igual que las piedras de grava de cada frasco, resisten el paso del tiempo. El paisaje urbano de Nueva York en aquella época se caracterizaba por la presencia de damas y caballeros con trajes y sombreros de doble botonadura, elegantes en su forma clásica, pero también por la juventud emergente, desenfrenada y llena de vitalidad. Los perfumes de Gravel capturan esta escencia.